“Si se abusa se pierde el encanto” pareciera ser una de las principales frases a la hora de hablar de las causas de la pérdida de deseo. Según los especialistas, “la respuesta sexual requiere estimulación y ésta, cómo todo lo que es estimulante puede producir cansancio en la persona. Entonces, algo que lograba estimular si se repite igual por mucho tiempo deja de producir el efecto del principio. De aquí la importancia de variar la rutina, comunicación efectiva”.
Aunque también influyen problemas en la relación de pareja, falta de experiencias agradables, acumulación de experiencias desagradables enque se tienen relaciones sólo para complacer al otro, problemas de autoestima y poco "material sexual”.
“Las disfunciones sexuales tienen causas orgánicas, psicológicas, pero también por uso de fármacos. Pacientes con cuadros depresivos pueden tener el deseo inhibido como parte de la sintomatología depresiva y por lo tanto el uso de fármacos puede afectar.”
La experiencia le ha demostrado a algunos especialistas en sexualidad que ésta es una de las principales consultas, alrededor del 50%. Aparentemente se da más en mujeres, aunque es probable que ellas consulten más, ya sea por machismo o porque los hombres son más reticentes a preguntar.
En las parejas en general, puede estar relacionada con las etapas del ciclo vital, es frecuente que las consultas por dificultades sexuales aparezca la inhibición del deseo. A los 16 o 17 años de matrimonio o alrededor de los 40 años de edad o cuando hay hijos adolescentes, surgen las crisis en la pareja, y por ende una intensa disminución del deseo.
¿Evitarlo o tratarlo?
Existen distintas formas de prevenir la pérdida de deseo, entre ellas , "no ver la sexualidad como un rendimiento, sino como un encuentro. El deseo del otro se puede vivir como una exigencia y no una invitación, una obligación y no una forma de seducción. Cuando el erotismo se traslada al campo del deber surge la presión, tensión, culpa y preocupación los cuales pasan a ser antiafrodisíacos de comprobada eficacia. También, dar paso a la imaginación”.
Pero si no logró evitarlo, existen terapias que pueden ayudar. “La terapia de pareja es una oportunidad para redefinir la dinámica en la sexualidad.Cómo se da la intimidad emocional, cómo están los cuidados mutuos, la co-construcción de la propia identidad y la pasión amorosa”.
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